Como muchos, supongo. Siempre he tenido la sensación de que cuando soñamos con otra persona, creamos una especie de lazo espacio-temporal donde rompemos la lógica más realmente lógica y nos unimos en un mundo subconsciente creado en base a, que se yo... Experiencias, emociones o energías místicas desconocidas externas o internas.
Quizás por que existen emociones muy fuertes que ligan en sensaciones a estos dos seres físicamente distantes pero sentimentalmente unidos, o hay lazos planetarios estelares que escapan a nuestros conocimientos que actúan en comunión con nuestra alma y mente. O que el poder y dominio mental de uno de ellos es superior y le es posible, con práctica, viajar a través de los sueños del resto.
O en su defecto ¿será casualidad?
O ¿será destino?
O ¿será Dios?
O ¿será algo mucho más poderoso y mucho menos entendible y desconocido?
En palabras menos enredadas y que no intentan explicar esto, siempre he tenido la sensación de que cuando soñamos con alguien, esta persona experimenta lo mismo al mismo tiempo que nosotros. Pero por alguna razón uno de los dos lo desconoce. Que existe un mundo a parte, un mundo que no es físico pero tampoco ficticio, un mundo donde experimentamos amor y odio, donde compartimos emociones y nos comunicamos con personas que en la vida real no conocemos, no vemos hace mucho tiempo o nunca han nacido.
Cuantas veces te has enamorado, cuantas veces has besado personas en tus sueños y en verdad el sabor, la textura y la sensación de ese beso ha sido mejor que muchos que en la vida física has dado. Cuantas veces has odiado, matado, estado en lugares que no conoces, sentido una pena o impotencia tan grande que te lleva a llorar y sentir una agonía como nunca, reído, incluso muerto en tus propios trances nocturnos. Cuantas veces has soñado cosas que pasan más tarde, o que me dicen de las personas que frecuentan tener sueños premonitorios.
Me imagino que los sueños tienen un poder mucho más trascendente de lo que creemos saber y desconocemos muchas cosas que a veces intentamos explicar o descifrar, y ni hablar del poder de la mente. Creo que hay por ahí en algún lugar del cerebro, un rinconcito muy pequeño, ínfimo, casi invisible y que aun no se ha encontrado, pero que tiene una gran influencia e importancia en nosotros, en nuestro vivir y que posee lazos directos con lo que es el subconsciente, el alma, la energía y nuestro organismo tangible.
Que hay muchas cosas ocultas y misteriosas que pasamos por alto y que sobretodo experimentamos al dormir, supongo que esto se debe a que ese es el estado más profundo, sereno y limpio en el que nos encontramos, donde nos hacemos más perceptibles y sensibles a sucesos que cotidianamente son extraños. Donde ya no actúan nuestros cinco sentidos conocidos, si no, los demás y los más poderosos.
En este texto no intento profundizar mucho en cosas que no sé.
Por que no las sé.
Y no pretendo hacer creer a nadie que las sé, pues no quiero saberlas tampoco.
Sólo que cada vez que sueño con alguien o algo especial, y es un sueño tan raro lleno de conceptos y cosas que no logro unir y que parecieran no tener lazos entre ellas, se me vienen estas preguntas a la cabeza. Por que sé que cada cosa dentro de los sueños, posee un significado y que cada pequeño significado desordenado en su conjunto posee un significado mayor e importante, como un rompecabezas de piezas cuadradas puestas en desorden que al parecer no dice nada.
Encuentro maravillosa la vida por todas esas cosas que no conocemos, las que nos faltan por conocer y las que definitivamente solo descubriremos al final de esta. La naturaleza humana que en si, es un misterio y la gran relación que tiene nuestra energía con la energía de el resto de las cosas.
Como dijo un gran amigo una vez por ahí... LA VIDA SABE MÁS QUE NOSOTROS.
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